Deepfakes, el método de moda para la suplantación de identidad

Deepfakes, el método de moda para la suplantación de identidad

Índice

Suplantación de identidad online

¿Recuerdas aquel vídeo que se hizo viral donde aparecían los líderes políticos del país como los miembros del Equipo A? Quizás sea una de las deepfakes más conocidas en España. Y es que las imágenes eran tan reales que realmente parecía que eran los actores de la mítica serie. ¿Cómo se hizo?¿Qué relación tiene con las deepfakes?¿Suponen algún tipo de riesgo para la ciudadanía, empresas o instituciones?¡Te lo contamos todo!

¿Qué son las deepfakes?

Las deepfakes o ultrafalsos, como también se llaman, son videomontajes hiperrealistas que este año se prevé que se convertirán en algo muy habitual ya que comienza a ser muy sencillo créarlas a través de diferentes programas y aplicaciones gratuitas.

Aunque en un principio pueda resultar divertido, esta herramienta supone en realidad un peligro por su capacidad para suplantar identidades.

Con ella se puede falsificar la cara y la voz de una persona en archivos de vídeo y audio usando inteligencia artificial, con una calidad que hace muy complicado diferenciar la realidad de la ficción.

Un uso cada vez más extendido

La firma de ciberseguridad danesa Deeptrace publicó un estudio el pasado octubre en el que señalaba que el fenómeno  de los ultrafalsos estaba creciendo rápidamente y que durante los primeros meses de 2019 habían detectado 14.678, un número que casi duplicaba el del periodo precedente.

Además, según el estudio, el 96% de los deepfakes en internet eran usados para la pornografía con la intención de introducir caras de personajes conocidos en escenas que nunca habían tenido lugar.

Pero, ¿cómo se crean?

Suplantación de identidad a través de las deepfakes

El que la suplantación se pueda hacer de una manera tan real y sencilla abre la puerta a usos ilícitos.

Para hacer un vídeo de ese tipo solo basta con una decena de fotografías y tener descargado una aplicación gratuita.

Un porcentaje muy elevado de estos vídeos están relacionados con la pornografía, pero otros muchos tienen relación con desacreditar a una persona haciendo creer que ha dicho cosas que no ha dicho, así como intentos defraude.

Esta estafa está teniendo especial trascendencia en la esfera política. Ya se ha podido ver montajes con Barack Obama diciendo que Donald Trump es un “completo idiota”.

Además supone un riesgo para cualquier empresa o institución. Imagínate una llamada del CEO de tu empresa en la que te pide unos documentos a un email, aunque no sea el correo electrónico tradicional se los pasarás. De hecho, en 2019 una compañía inglesa pagó mas de 200.000€ a unos cibercriminales que habían manipulado la voz de su jefe con declaraciones sensibles sobre la cotización de la empresa.

¿Se están tomando soluciones?

Por el momento, Facebook ha anunciado medidas y prohibirá esos vídeos de cara a las elecciones estadounidenses de 2020. En China están prohibidos desde comienzo del año.

A pesar de ello queda saber cómo conseguirán detectar este tipo de inteligencia artificial ya que a día de hoy no existe un software capaz de hacerlo.

Lo que hace crecer el temor de que estas deepfakes puedan destruir una reputación en cuestión de segundos mediante un vídeo manipulado, inclinar unas elecciones ajustadas o cambiar el curso de una compañía. Solo el tiempo dirá hasta qué punto llegan las consecuencias de esta nueva tecnología.

¿Lo importante? Estar al día de los peligros que, como este, van apareciendo en Internet. Para ser capaz de detectarlos y actuar frente a ellos. 

Es necesario crear una sociedad crítica con los dispositivos electrónicos y el mundo online y que esté preparada para aprovechar todos sus beneficios y evitar los riesgos que conlleva.

¡Manténte informado con Gaptain!



Acerca de Sandra
Gaptain es un proyecto de impacto social que tiene como misión educar y proteger a los menores en el ámbito digital


>> Ver PORTADA >>